Garceta común (Egretta garzetta)

Garceta común (Egretta garzetta)

Clasificación científica

Reino:             Animalia

Filo:                Chordata

Clase:             Aves

Orden:            Pelecaniformes

Familia:         Ardeidae

Género:          Egretta

Especie:         Egretta garzetta

La garceta común es la más pequeña de las garzas. Es una especie de ave pelecaniforme de la familia Ardeidae, una de las más comunes en los humedales del todo el mundo. La Península Ibérica es su cuartel de invierno, como el resto de la Europa mediterránea, y aquí también se reproducen, sobre todo en el delta del Ebro, albufera valenciana, Coto de Doñana y Extremadura. Muchos individuos pasan en la península todo el año.

Es de actividad diurna y al anochecer se dirigen a sus dormideros, en grupos más o menos numerosos, siguiendo siempre las mismas rutas.

Se alimenta de peces pequeños, reptiles, batracios, gusanos, crustáceos, moluscos e insectos. En aguas tranquilas y someras, acecha a sus presas, inmóvil, con el pico apuntando al agua. Cuando un pez pasa cerca, estira el cuello con rapidez y lanza con precisión su terrible pico.

El adulto mide entre 50 y 65 cm y tiene una envergadura alar de entre 90 y 105 cm, llegando a pesar entre 450 y 550 gr. Esta pequeña y graciosa garza es enteramente blanca, adorna su nuca con un penacho de dos largas plumas, de unos quince centímetros, en la época de reproducción. Su librea nupcial se engalana también, en el dorso, con largas plumas vaporosas y esponjadas que brindan aún más gracia a su figura; el pico es largo y de color negro excepto en la base de la mandíbula inferior que es de color gris verdoso; las patas negras con los dedos amarillos. El iris es amarillo, con una gran pupila negra. No hay dimorfismo sexual. Los jóvenes son parecidos al adulto.

En vuelo, ostenta la silueta de las garzas: cabeza “entre los hombros” y patas largas estiradas hacia atrás, sobresaliendo de la cola.

Cría en árboles y arbustos situados en las inmediaciones del agua como orillas de embalses, riberas de anchos ríos, estuarios, etc. En ocasiones, también entre la vegetación palustre. Nidifica en colonias laxas con otras garzas, martinetes, espátulas y garcillas.

Ambos sexos construyen el nido, el macho aporta ramas y tallos y la hembra construye el nido en forma de embudo. A veces ocupan el nido de años anteriores, con previas reparaciones. Realizan una puesta, entre abril y junio, de 3 a 5 huevos de color azul-verdoso. La incubación, por ambos sexos,  es de 21 a 25 días y vuelan a los 35 días.

Las jóvenes garcetas optan por emigrar, sobretodo al norte de África, o bien permanecer en zonas próximas a su lugar de nacimiento (migración parcial).